Nelson Soto regresó a buscar el calor tropical de su natal Barranquilla. En su campamento de Pamplona, en España, el frío ya comienza a hacerse presente, vendrá el invierno y el ‘Huracán’ definitivamente no quería volver a pasar por el frío impresionante que experimentó a principios de este año cuando cruzó el océano hacía el ‘Viejo Mundo’.

Allá llegó con una maleta cargada de sueños, muchas ilusiones y se encontró con mucho trabajo por realizar. No le resultaría fácil, en medio del frío, acomodarse al candente ritmo del ciclismo europeo, en el cual solo pueden destacar los verdaderos campeones.

Hoy, luego de todo ese calendario exigente, con un triunfo en la Vuelta a Madrid y un cuarto puesto en La Vuelta a España, Soto reposa 10743.94 kilómetros de carrera de este año, logrados durante los 73 días de competencia en los cuales participó sobre su bicicleta.

El mejor pedalista de la historia de Barranquilla atendió con la amabilidad de siempre a Zona Cero, a quien le dio los detalles de un año inolvidable para él y de lo que le espera en el 2019.

¿Qué balance hace de su primera temporada en Europa?

Bueno, personalmente estoy muy contento, muy satisfecho. La verdad es que todos los amigos que tengo que han corrido en Europa me decían que el primer año, a veces incluso los dos primeros, siempre son complicados de adaptarse a este ciclismo que es un poco diferente. Estoy haciendo las cosas bien, tratando de aprender. Ha sido una bonita temporada en Europa para mí.

Usted logró esta temporada un cuarto puesto en La Vuelta ¿Piensa que ese resultado lo pone en el tope del ciclismo nacional?

Yo creo que ese cuarto puesto en La Vuelta es importante. No es nada fácil un top-10 en una carrera tan importante como esta. En parte se empieza a mostrar uno, se empieza a dar esos pasos al lado de los grandes corredores especialistas de esta modalidad. Me da confianza a mí, saber que puedo luchar por los primeros puestos.

También logró cosas importantes como el oro de los Centroamericanos, además de un triunfo en la Vuelta a Madrid ¿Lo imaginaba así de bien?

Los Centroamericanos, como te había contado una vez, si le tenía ganas. Entrené muy bien para eso y se nos dieron. Feliz de haber logrado esa medalla de oro para Barranquilla, para Colombia. En cuanto a Europa, esa victoria la busqué desde que llegué. Tenía mucha ilusión de ganar una etapa con mi nuevo equipo. Hice varios top-10 y además La Vuelta.

El Caja Rural siempre ha sido un equipo de montaña, el año entrante anuncian más embaladores ¿Eso quiere decir que están cambiando la forma de correr?

Sí, la verdad es que el equipo está cambiando esa forma de correr. Siempre ha sido un equipo de estar en fuga buscando etapa, sobre todo en las de montaña. Han hecho una apuesta ahora por las etapas del sprint, el equipo ha tenido buena presencia en este tipo de llegadas. Como lo dices, llegan dos sprinters nuevos, no sé qué tal vayamos a trabajar, pero esto es algo muy importante para mí y para el equipo en general, tener personas especializadas que nos van a tener respaldados. Me hace gran ilusión la próxima temporada, ojalá haga una buena pretemporada.

Su cuarto puesto fue el mejor resultado del Caja Rural en La Vuelta ¿Es algo muy importante para usted o más para sus jefes?

En esta Vuelta fue el mejor puesto. Tuvimos algunos top-10, muchas fugas como es normal en el equipo, pero el cuarto puesto fue muy importante. La verdad que el día que quedé de cuarto estaban muy contentos con la actuación mía y del equipo. Querían que las próximas etapas estuviera otra vez por ahí, pero cada etapa es distinta y en las otras ocasiones hubo algo que lo impidió. Están contentos conmigo.

¿Para un embalador como usted, que tan difícil fue La Vuelta con etapas como Lagos de Covadonga o el Col de la Gallina?

En general fue una vuelta complicada para mí. Traté de disfrutarla en lo que podía, la primera semana estuve mal del estómago, después la caída que pensé que me iba a retirar porque tuve un golpe muy fuerte en la pierna, prácticamente no la podía apoyar. Pero fueron dos días que pude pasar sin pararme en los pedales, porque tenía ganas de terminar La Vuelta. En cuanto la subida, siempre tratando de ir con los sprinters, que vamos a una velocidad menor que los escaladores (¿El grupo de la sabrosura le dicen?) Bueno, 'sabrosura', entre comillas, porque atrás no se va tan relajado. En las bajadas arriesgamos bastante para recortar tiempo y en el plano también se va muy rápido. Vamos a un ritmo distinto, pero llevamos otra carrera atrás.

¿Cómo es compartir 10 o 15 kilómetros subiendo al lado de grandes referentes como Peter Sagan o Elia Viviani?

Prácticamente que todos los días de montaña vamos los mismos corredores. Siempre estos corredores como Viviani o Sagan van con tres o cuatro compañeros que los ayudan a no perder tanto tiempo (¿Y usted iba solo?) Bueno, no había problemas. Después de que estuviera en ese grupo sabía que podía salvar la etapa. Se aprende también a guardar esas fuerzas, porque al final son para las próximas etapas de montaña. Son corredores que tienen mucha clase, íbamos subiendo y todo el mundo es: ‘Vamos Nelson’, ‘Vamos Viviani’, ‘¡VAMOS SAGAN, VAMOS!’, o sea, se descontrolan con él. Es una vaina de locos, cuando eran esos muros con tanta gente siempre habían muchos colombianos. Trataba de disfrutarlas, muchas veces me veían sonriendo pensando que iba tranquilo, pero era porque estaba disfrutando esos momentos.

¿La Vuelta a España fue todo lo que usted había soñado?

Se puede decir que sí. La primera semana se me hizo muy larga, era una carrera en la que había que guardar fuerzas. Algunos amigos me decían que no importaba el tiempo que perdiera, que después de que llegara en el límite, tratara de ahorrar fuerzas, porque al final son 21 días y cualquiera de esos te puede pasar cuenta de cobro y mandarte a casa. Eso era lo que no quería, por eso el día que podía perder tiempo lo hacía y bueno terminé La Vuelta que fue significativo para mí.

¿En visto de lo desarrollado este año, tiene algo en mente para la temporada del 2019?

No hay una carrera así en particular que quiera correr. Bueno, pero si espero tener una buena temporada con el equipo y se si pudiera me gustaría volver a intentar La Vuelta. Fue algo muy duro, pero muy especial, muy bonito, algo que siempre he querido y ya teniendo esta temporada encima es un punto más que te da. Me gustaría regresar el otro año.

Por lo pronto en el 2019 estará nuevamente en el Team Barranquilla ¿Qué opina del progreso del programa?

Es un orgullo para mi pertenecer al Team Barranquilla. Me parece una gran idea del alcalde Alejandro Char, que cada vez sean más los deportistas incluidos en este programa. era algo que le faltaba a nuestra ciudad, que los jóvenes vean el deporte como una salida, como una carrera profesional.

También sería bueno que este mismo progreso se reflejara en la Liga de Ciclismo del Atlántico ¿No le parece?

Sin duda, todo lo que sea mejorar sirve. Esperemos que la Liga tome un mejor camino. Tengo entendido que el último presidente renunció y no sé quién estará afrontando ahora. PEro esperemos que sea alguien con ganas de ayudar y de aportar al deporte y mover a todos estos jóvenes que están saliendo.

Nelson Soto ya entró en ‘temporada muerta’, es decir no volverá a competencias hasta el año entrante. En enero está citado a presentarse en Pamplona, para los campamentos de pretemporada e iniciar la búsqueda de más triunfos en las carreteras de Europa.